EL DIA QUE UN LEOPARDO SE COMIO MI BEAN BAG

Como fotógrafo de naturaleza, son múltiples las anécdotas cuando trabajas cerca de fauna salvaje, ellos deciden muchas veces si hay foto o no y si te vas ese día a casa con la cámara llena de fotos o marchas de vacío.

Sin duda, una que no olvidaré, es lo que sucedió con este joven ejemplar de leopardo.

Ultimo día de un gran safari en Kenia, localizamos un leopardo en la zona sur-centro del Mara, una hembra y su cachorro deambulan por la ribera del río con cierta tranquilidad, esto nos permite poder fotografiarlos a placer durante más de dos horas, de cerca, de lejos, andando, de pie, en fin, un verdadero espectáculo para cualquier fotógrafo de naturaleza, un premio a la constancia, sin duda.

Lo que no podía imaginar jamás, ya son más de 30 safaris, es que después de un buen rato de sesiones con los felinos, el cachorro de repente siente cierto interés por el vehículo acercándoselo cada vez más, hasta que al final descubrió mi bean bag (una especie de saco lleno de judías para estabilizar las lentes).

Tras varios intentos, al final, consiguió arrebatármelo y jugar con él, sin duda, una experiencia única.

Espero que disfrutéis con este post tanto como con la experiencia, que dudo mucho que se repita.